viernes, 12 de julio de 2013

Pajaritos heridos.



Sobre mis ramas tengo dos pajaritos a punto de caer,
no puedo moverme a todas partes con ellos, no puedo sostener sus soledades, ni sus cajitas de muerte.
No están a mi alcance todas las felicidades que moverían sus alas.
Solo tengo un poco de calor, melodías y poemas, y en las noches de tormenta o neblina una sonrisa arcoíris. 
Bajo mi cascara también aveces me pudro, 
aveces mis latidos se estremecen de llanto cuando escucho en sus miradas 
un dolor que me quema hasta la pena y me da rabia,
me pesa y pesa el ceso y el cuerpo,
me agarro de mis sueños, de mi alma y me subo a la aventura que vuela lejos de la jaula.
Pero mis pajaritos queridos están apunto de caer
y aún no se atreven a salir y volar.